A estas alturas, si sigues este blog, seguramente te habrás dado cuenta de que en el marketing digital importan más la calidad que la cantidad. Hace algunos años, tenía importancia el número de palabras en un post para conseguir posicionarte. Ahora ya casi no tiene ninguna. Lo que importa es el contenido. Esto es para que te hagas una idea: de lo que se trata no es de conseguir más seguidores, sino de obtener seguidores más fieles, que lean de cabo a rabo lo que escribas, que comenten, que te ayuden a conocer a tus clientes, etc.
Hace poco, os hemos hablado de las ventajas del marketing de contenidos y de los tipos. Habrás adivinado también que los contenidos deben ser informativos, deben divertir y no aburrir y deben motivar al lector.
¿Cómo se hace eso? Os vamos a revelar un secreto: haciendo cosas como estas que tenéis a continuación podéis conseguir vuestros objetivos en cuanto a los contenidos de vuestras páginas, blogs, etc:
- Contar historias que enganchen, que sean buenas. Y si tienen final feliz, mucho mejor. Pretty woman no es un hito en las taquillas de los cines porque sí… Piénsalo.
- Sorprende con algún concurso o algún contenido diferente y que se salga de la norma.
- No escribas como si fueras un catedrático. Escribe para que tus clientes o lectores no se sientan abrumados. Un ejemplo: imagínate que vas a hacer una oposición a Secundaria para sacar una plaza de profesor de Biología y eres geólogo y te cae una pregunta sobre geología. ¿Cuánto crees que sabe de geología la persona que va a juzgar tu examen? Eso es: lo que ha preparado para dar clases a chavales de 2º de Bachillerato. Ni más ni menos. En definitiva: escribe para gente que comienza, que son los que más buscan. Los que ya saben, buscan poco y lo tienen muy claro.
- Soluciona algún problema a tus lectores. ¿Y cuáles son sus problemas? Pregúntaselo y pregúntatelo.
- Devela algún secreto con cosas que no lo son tanto. Extráelo de tu experiencia y dale el valor de la práctica y de la validación que te ofrecen tus años en el sector. Haz de descubridor, de explorador con cosas que a primera vista no se notan, pero que siempre han estado ahí. ¿Te suena de algo?
Y todo esto para qué te preguntas ahora mismo: pues para ganarte la confianza de tus lectores, para conseguir una relación más cercana con ellos, para que sientan que pertenecen a algo importante, para motivarles, para satisfacer sus necesidades y demandas. En definitiva, para que se convierta en un cliente satisfecho y en tu mejor embajador.
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